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Un estallido de emociones salpicó mi alma, como si hubieran explotado todas a la vez, la tristeza, la alegría, la ira,..  la carta se deslizó entre mis dedos terminando en el suelo de madera del salón, no podía moverme, me quedé unos segundos sin respiración, sobrecogida puse una mano sobre el pecho e intenté respirar profundamente.

Frases Del LIbro

El alma de Moira

Los ojos son el reflejo del alma y para que tus ojos no estén llorosos y con ojeras debes saber curarla, un alma sana son unos ojos despiertos y una sonrisa codiciada.

Frases del libro

El alma de Moira

Debía ser más fuerte que nunca,debía transformar mi ansiedad en fortaleza, debía sacar algo positivo a lo que acababa de ocurrirme, porque por primera vez presentía que me estaba acercando a la verdad

Frases del libro

El alma de moira

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De repente exóticos olores se introdujeron por mis fosas nasales, me atraparon envolviéndome con un embriagador aroma que se extendía por todo el bulevar.

Frases del Libro

El alma de Moira

Nunca es tarde para encontrar respuestas y la vida no es nada sencilla. Buscar la felicidad no va a ser fácil pero todos debemos esforzarnos, poner nuestro granito de arena para encontrarla, pero yo os aseguro que ahí está.

Frases del libro

El alma de Moira

Espero no perecer en tu memoria y perdurar para siempre al igual que tú pedacito de alma perdurará en mi corazón

Frases del Libro

El alma de Moira

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Del libro

 
El alma de Moira.


Deseo que el camino hacia la felicidad que siempre has buscado sea tuyo al fin.
Un estallido de emociones salpicó mi alma, como si hubieran explotado todos a la vez, la tristeza, la alegría, la emoción, la ira… La carta se deslizó entre mis dedos terminando en el suelo de madera del salón, no podía moverme, me quedé unos segundos sin respiración, sobrecogida, puse una mano sobre el pecho e intente respirar profundamente. En vano. Me dirigí hacia la ventana, me temblaban las piernas, intente abrirla, necesitaba aire, conseguí entreabrir una rendija, un sudor frío recorrió mi cuerpo y una suave brisa me espabiló, me dio la tregua que necesitaba para respirar y, poco a poco, me deje caer al sillón y comencé a llorar desconsoladamente hasta que me dormí.

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